Un revelador informe de la Aeronáutica Civil entregó detalles sobre el dramático rescate de los cuatro hermanos Mucutuy perdidos durante 39 días en la selva del Guaviare, luego de que la avioneta en la que viajaban con su madre se estrellara el 1 de mayo de 2023.
Luego de un año del accidente, La Aerocivil aclaró que el piloto decidió hacer un aterrizaje de emergencia sobre la selva, al darse cuenta que no podía llegar al río Apaporis, “se posó aparentemente de manera controlada sobre los árboles y luego se precipitó a tierra de manera casi vertical. Como resultado de la maniobra, hubo daños sustanciales en la aeronave y lesiones mortales para tres de sus ocupantes, adultos”.
Sin embargo, lo más relevante de este informe, es el testimonio de Lesly. quien contó que perdió el conocimiento por varios minutos tras el impacto y al despertar, descubrió que salía mucha sangre de su cabeza, mientras escuchaba a sus hermanos llorar.
Lo primero que hizo esta pequeña fue liberarse, pues su pie izquierdo quedó atrapado en la silla y luego fue por el bebé, quien se estaba sofocando bajo su madre, que ya había fallecido. Teniendo este a salvo, soltó a sus otros dos hermanos, que estaban sentados en las sillas traseras de la aeronave.
Según lo revelado los pequeños estuvieron durante dos días y dos noches en el lugar del accidente, comiendo frutas copoazú y tomando el agua que había dentro de la aeronave.
“Conforme lo manifestó la superviviente entrevistada, ella pensó que, siguiendo a lo largo de la orilla del río Apaporis, no encontrarían población alguna, y que esto sería posible si se internaban en la selva. Fue así como regresaron a la selva, y después de aproximadamente tres (3) días de caminata en círculos, sin notarlo y de manera no intencional, los sobrevivientes llegaron nuevamente al sitio en donde se encontraba la aeronave”, detalló el informe.
De acuerdo con el informe de la Dirección Técnica de Investigación de Accidentes de la Aerocivil, uno de los momentos más angustiantes fue cuando los niños sobrevivientes escucharon el perifoneo y las grabaciones en su idioma indígena, pero debido al denso follaje no pudieron avistar las aeronaves de búsqueda ni realizar señales visuales hacia ellas.
La mayor de las hermanas Mucutuy, en su testimonio, mencionó que escucharon sonidos de aeronaves entre los días 10 y 15 después del accidente, pero no pudieron verlas debido a la vegetación. Además, escucharon voces que no pudieron identificar y decidieron no acercarse por temor a depredadores.
El informe reveló detalles de una entrevista que le realizaron a la hermana mayor. Según se conoció, durante la travesía, avistaron tapires, serpientes y una tortuga, pero no tuvieron encuentros con otras personas ni con caninos. A pesar de que los equipos de búsqueda arrojaron kits de supervivencia desde el aire, los niños no pudieron encontrar ninguno. Solo en el día 30 encontraron uno de los volantes con instrucciones para detenerse y facilitar su ubicación.
Finalmente, el día 39, siguiendo las instrucciones del volante, los niños fueron encontrados en un estado de debilidad extrema, especialmente el niño de 4 años, quien ya no podía mantenerse en pie. Trágicamente, en el accidente fallecieron tres personas, incluida la madre de los niños.
Durante la operación de búsqueda y rescate, participaron militares, entidades de socorro e indígenas, y también el perro rescatista llamado Wilson, aunque después del rescate de los niños, el paradero del canino sigue siendo desconocido.