Doce pasajeros de un vuelo de la compañía LATAM procedente de Sydney fueron hospitalizados el lunes en Nueva Zelanda después de que su avión, con destino a Chile vía Auckland, registrara “un incidente técnico” que causó una fuerte sacudida y propulsó a las personas hacia el techo.
Los pasajeros explicaron a la prensa local que el aparato, un Boeing 787 Dreamliner, perdió altitud rápidamente cuando sobrevolaba el mar de Tasmania y propulsó al techo a todas las personas que no llevaban puesto el cinturón de seguridad.
Varios pasajeros que han hablado con la prensa coinciden en que las personas que salieron volando no llevaban puesto el cinturón de seguridad.
Según los testigos, algunos pasajeros tenían huesos rotos, mientras que otros sufrieron lesiones en el cuello y la cabeza. Algunos incluso rompieron parte del interior del avión al impactar con sus cabezas y hombros contra el techo.
Según el equipo que atendió el incidente en tierra, 50 personas resultaron heridas y 12 fueron trasladadas a un hospital en Auckland.
Los servicios de emergencia dijeron que un pasajero se encontraba en estado grave.
Al menos tres miembros de la tripulación estaban siendo atendidos.
La aerolínea se pronunció
Ante el hecho, Latam se pronunció con un breve comunicado en el que explicó que todo se trató de un problema técnico.
“El vuelo LA800, que opera hoy la ruta Sydney – Auckland, tuvo un problema técnico durante el vuelo lo que provocó un fuerte movimiento (…) Como consecuencia del incidente, algunos pasajeros y tripulantes de cabina resultaron afectados”, dijo la aerolínea.
Además, la empresa agregó que el avión había llegado a la ciudad de Nueva Zelanda “de acuerdo a lo programado”.
Y agregó que “tras la cancelación del vuelo, se definió uno nuevo (LA1130) para el 12 de marzo de 2024, programado para salir desde Auckland a las 20:00 hora local con destino a Santiago de Chile. LATAM se encuentra entregando servicio de alimentación y alojamiento a los pasajeros afectados por la suspensión del vuelo”.